30 años de lecturas y registros
XXIV Congreso Pedagógico 2019
EDUCACIÓN PÚBLICA EN LUCHA
LECTURAS Y REGISTROS PARA LA CONVIVENCIA CIUDADANA
Ponentes: Natalia Balbazoni de Lajonquiere[1], Federico Cáceres, Rosario Haddad[2] y Eduardo Hossein[3]
Título: La práctica musical colectiva de instrumentos autóctonos.
Construcción de la identidad pluricultural en la escuela pública
Palabras clave: Primaria. Media. Música. Instrumentos autóctonos. Identidad pluricultural. Escuelas de Música.
Concierto: “La Montaña va a la Escuela” (21/10/2019).
Introducción
La cátedra de Instrumentos Autóctonos está presente en ocho de las 15 Escuelas de Música del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, casi todas ellas de zona sur. Introduce a niños y jóvenes en la práctica de instrumentos folklóricos y de raíz ancestral de diferentes culturas de nuestro país y Sudamérica. Es una cátedra joven dentro de la trayectoria que tienen las Escuelas de Música del Gobierno de la Ciudad y con una matrícula no muy amplia en la mayoría de los casos.
A lo largo de los últimos años les profesores de Instrumentos Autóctonos hemos propiciado encuentros de reflexión e intercambio sobre nuestra práctica docente y el lugar secundario que ocupaba nuestra especialidad dentro de las instituciones educativas. La primera propuesta que pudimos elaborar en estos años fue presentada en el Congreso pedagógico UTE 2016. Se trataba de dar a Instrumentos Autóctonos rango de materia “individual“ conservando su práctica grupal, alejándola del formato de “materia optativa“, entre otras a las que les niñes accedían como segunda materia.
Esta modalidad, que permitió que algunes niñes comenzaran a practicar instrumentos autóctonos como su instrumento principal, refleja nuestra intención de asignar a los instrumentos de raíz autóctona y criolla un lugar de pertenencia concreto y privilegiado dentro de las Escuelas de Música pertenecientes al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En la presente exposición, intentamos profundizar este concepto. Sostenemos que la Escuela Pública debe reflejar la esencia pluricultural que se condice con nuestra idiosincrasia, nuestra historia y nuestras raíces. En tiempos de neoliberalismo, más que nunca desarrollamos nuestra profesión con una mirada crítica e impulsamos propuestas para salir de la monocultura que se nos intenta imponer objetiva y subjetivamente.
Desarrollo
A raíz de diversos encuentros entre colegas hemos podido reflexionar sobre la necesidad de revalorizar la Cátedra de Instrumentos Autóctonos y el trabajo grupal de les chiques que participan. Tal como lo mencionamos, nuestras cátedras vienen con un origen de materia secundaria optativa y aun hoy, devenidas muchas veces en materia principal, suelen tener una baja matrícula, al menos en comparación con otras fuertemente incorporadas en la música académica y popular ciudadana como el piano o la guitarra. Esta realidad nos lleva a problematizar la necesidad de trabajar para incidir sobre los estereotipos musicales hegemónicos y propiciar espacios de transmisión de saberes diversos, que forman parte de nuestra interculturalidad.
Desde el año 2014 estamos llevando a cabo proyectos de articulación de cátedras que han devenido en conciertos conjuntos en escenarios como la Legislatura Porteña, Feria de Mataderos, Instituto de la Música, Instituto Bernasconi, entre otros. Hemos compartido escenario con artistas destacados como Miriam García, Valentín Chocobar y Silvia Iriondo. Estas experiencias acompañan nuestra convicción de que nuestra música ancestral y folklórica no es una postal que registra recuerdos sonoros de lugares estancados en la distancia y el tiempo. Nuestros Instrumentos Autóctonos son la expresión viva de nuestras raíces, de nuestra música genuina, que está vigente y se sigue reeditando. Acercar a les niños y niñas a estas expresiones musicales es darles la posibilidad de enriquecer su cultura y amarla tanto como nosotres. Para que esto sea posible vamos buscando esos espacios y escenarios que nos permitan visibilizar y jerarquizar la disciplina.
Concierto en la Feria de Mataderos (20/10/2019).
La Escuela Pública debe cuidarse como un preciado bien social que otorga herramientas emancipadoras, garantiza el derecho al conocimiento y puede ser el puente a través del cual se traspase la penosa realidad de desigualdades de un sistema neoliberal que desde 2015 viene generando retrocesos y recorte de derechos. Esta coyuntura no escapa a una tendencia que se viene impulsando desde los centros de poder económicos mundiales y van minando las democracias de Latinoamérica.
En este contexto, nuestra práctica debe ser el reflejo de los valores y derechos que no queremos resignar. El desafío fue entonces generar espacios de trabajo en equipo que bajo diversas modalidades (encuentros, grupo de whatsapp, envío de grabaciones con ensayos, entre otros) nos han servido para elaborar acuerdos y abordar maneras de funcionar colectivamente.
Estos conciertos que venimos realizando desde hace ya seis años ininterrumpidamente empiezan a consolidarse y a abrir nuevos caminos.
El año 2019 comienza con la propuesta de repetir las experiencias de conciertos conjuntos en la Feria de Mataderos (por cuarta vez) y en nuestras respectivas Escuelas de Música. Como propuesta pedagógica, para ese año acordamos incorporar el uso de sikus e integrar algún ritmo latinoamericano no abordado en los repertorios anteriores.
Pero sin duda la propuesta más convocante para ese año fue la invitación que recibimos por parte de la artista Miriam García para participar de los conciertos en conmemoración del centenario del nacimiento de Leda Valladares, que derivó en el proyecto “La montaña va a la Escuela”. Este proyecto implicó acercar a nuestros alumnos al canto con caja, y nos involucró a les docentes a adentrarnos con nuestres alumnes en este género poco abordado desde nuestros espacios. ¿Cómo acercar a les chiques a este repertorio con el que no están familiarizados?, ¿cómo abordamos la falta de instrumentos musicales? Estos y otros desafíos fueron sorteados y hoy son un nuevo bagaje de experiencias para seguir complejizando nuestra práctica.
En nuestro proyecto “La montaña va a la escuela“ (denominado así por ser el nombre con el que Leda Valladares transmitía sus saberes a les docentes de Buenos Aires y otras ciudades), hemos abordado este desafío que culminó en un Concierto el día 21 de octubre en el que las cátedras de Instrumentos Autóctonos de las Escuelas de Música 6, 7 y 12 fuimos parte de los 100 conciertos que se realizaron a lo largo de todo nuestro país.
Justamente este hacer “en conjunto” forma parte de la misma esencia que queremos construir desde la cátedra, y a su vez va abriendo puertas a nuevas experiencias a partir de las cuales seguimos construyendo conocimiento.
A modo de conclusión
Abordar estas articulaciones implica, en todos quienes nos involucramos, la firme decisión de dar a nuestres niñes la oportunidad de experimentar colectivamente la Música y la posibilidad de compartirla transitando diferentes escenarios y experiencias que enriquezcan sus vivencias musicales. A través del tiempo estas experiencias de articulación intercátedra fueron ocupando un lugar importante dentro de nuestra cátedra y posibilitaron una visibilización de nuestro espacio. Esto permitió tener un lugar de pertenencia en nuestra escuela, el barrio y otros espacios culturales que nos han permitido retroalimentarnos con invitaciones, como participar del homenaje a Leda Valladares, o ser parte de los programas radiales Hacha y Tiza y Sintonía Educar, donde los chicos tocaron en vivo, además de ser entrevistados.
También brindó a nuestres niñes y jóvenes la posibilidad de ser parte de una construcción a través de la cual pudieron concretar experiencias propias, como grabar un Cd o sumarse a determinados conciertos vinculados a actividades barriales (Noche de los Museos, Aniversario del barrio de La Boca, Feria Internacional de Lutheria de la Asociación Argentina de Luthiers, entre otros).
El hacer colectivo, sin interponerse ni sustituir el trabajo áulico que cada une de nosotres realiza en su escuela, va nutriendo de sentido una metodología de trabajo que aborda maneras funcionar en donde la esencia es comunitaria tal como nos lo transmiten los pueblos originarios, reconociendo la riqueza de las diferentes culturas latinoamericanas. Creemos importante ir diluyendo aquellas representaciones simbólicas que direccionan la Música hacia un estereotipo que no nos pertenece, pero terminamos asimilando, si no otorgamos una pertenencia concreta a las distintas vertientes que nos conforman.
¿Qué ofrecemos a nuestros estudiantes al transitar esta vivencia de práctica colectiva? Mucho más que la posibilidad de adquirir técnicas de ejecución e interpretación musical. Compartimos una experiencia que se corre del individualismo y la competencia, construyendo un proyecto donde valores como el compromiso, el logro colectivo, el respeto por el otre y el placer del encuentro enriquecen la práctica.
Notas
[1] Escuela de Música Nº 12 D.E. 19.
[2] Escuela de Música Nº 6 D.E. 13.
[3] Escuela de Música Nº 7 D.E. 11.