30 años de lecturas y registros
XXIV Congreso Pedagógico 2019
EDUCACIÓN PÚBLICA EN LUCHA
LECTURAS Y REGISTROS PARA LA CONVIVENCIA CIUDADANA
Ponentes: Andrea Delgado[1] y Patricia Guijarrubia[2]
Título: Filetes sobre rieles
Palabras clave: Primaria. Curricular. Plástica. Arte popular. Barrios.
El viaje de aprender no es sólo una metáfora de recorrido, trayecto o tramo.
El viaje son los altos y bajos, los túneles y árboles misteriosos,
espejos o escaleras que nos hacen pasar de un mundo a otro,
alcanzar la luna con las manos o atravesar la frontera del laberinto.
Prólogo de Chiqui González al libro de Leandra Bonofiglio
Conjugaciones. Hacia una eduación ética y estética.
Rosario, Remanso, 2014.
Viajando se fortalecen las pinceladas
Venimos a proponerles un viaje histórico que une a una escuela pública y a un
espacio verde y público de la ciudad de Buenos Aires. Un viaje que también enlaza
tiempos pasados y presentes. La escuela es la número 9 D.E. 13 “HOMERO MANZI”
y el espacio verde es el Parque Avellaneda, articulando espacios, saberes y
propuestas culturales se desarrolla el proyecto educativo “Aulas a cielo abierto”
desde el año 2001.
Invitamos a un viaje no lineal, con avances y diferentes momentos simultáneos.
El Parque Avellaneda está ubicado al sudoeste de la ciudad de Buenos Aires,
formado por 38 hectáreas repletas de árboles añosos, con aves en libertad y
destacados edificios históricos: un Antiguo Natatorio, hoy EMED N°2 DE 13 y Centro
Cultural; un Antiguo Tambo, hoy Centro de artes escénicas y una Casona de
mediados del siglo XIX que hoy es sede de la Gestión Asociada y de Planificación
participativa que caracteriza a la organización de este espacio público, también
aquí funciona el Centro de Arte Contemporáneo.
El viaje que venimos a proponerles será en el Trencito del Parque que desde 1936
en forma discontinuada recorre 1,5 km desde la estación Onelli. En su locomotora
y en sus vagones lleva recuerdos de infancias de siempre, bienvenidas y despedidas,
equipajes tangibles e intangibles...Durante el trayecto del viaje vamos a compartir especialmente un interrogante ¿cómo es que un grupo de niñas/os de 5° de una escuela pública del barrio de Mataderos fileteó los nombres de la locomotora y los vagones?
Tal vez todo comenzó cuando una mañana de primavera, cerca de la puerta de ingreso a la Casona de los Olivera, nos encontramos Andrea y Patricia con nuestras experiencias, una de docente fileteadora y la otra coordinando Aulas a cielo abierto. Allí intercambiamos, le comenté el proyecto de fileteado que veníamos desarrollando desde principio de año en la escuela, “El fileteado porteño, el arte público en la escuela y sus repertorios visuales”. El disparador de dicho proyecto fue el nombre de nuestro patrono Homero Manzi. La técnica del fileteado está íntimamente ligada al tango, como la de nuestra escuela y nuestro barrio. Uno de nuestros objetivos, entre otros, consistió en acercar a los/as chicos/as a esta técnica de pintura popular que se fue transmitiendo de fileteador a aprendiz durante este último siglo en varios barrios de nuestra ciudad. Pudimos compartir y preguntarnos ¿Cómo el arte popular manifiesta las identidades diversas? ¿Cómo valorar la propia cultura y respetar las otras en la diversidad? Y fue creciendo el fileteado en aulas a cielo abierto…
Para este proyecto trabajamos en conjunto con diferentes áreas. Con el área de tecnología[3] se armaron los transportes, carros, camiones, colectivos y trenes que luego serían fileteados. Justamente el fileteado porteño tuvo su origen en las fábricas y talleres de carros, donde los primeros pintores crearon su estilo y su técnica. Los pioneros del fileteado porteño fueron moldeando el oficio, trabajando en la ornamentación y en la decoración de los vehículos. Sin embargo, en plena dictadura fue prohibido el fileteado en los colectivos por la SETOP, Secretaría de Transportes y Obras públicas, Nº 1606/75. No es casual que para la misma época el Parque que hoy está recuperado por los vecinos y trabajadores, estuviera totalmente abandonado.
En el año 2006 fue derogada dicha ley y en el año 2015 el fileteado porteño fue declarado patrimonio intangible de la humanidad. Tampoco es casual que el patrimonio del Parque solo pudo recuperarse con la llegada de la democracia, gracias al compromiso de los /as vecinos/as y trabajadores y de algunas gestiones gubernamentales, su forma de organización está plasmada en la ley 1153 (2003).
Desarrollamos el proyecto también con el área comunicacional, integrando al proyecto de radio REC (Red escuela y comunicación) con la profesora Paula Salbochea. Los/as chicos/as realizaron entrevistas en la escuela y en el Parque, cual periodistas en busca de información y expresando sus propias ideas. Hacia fines de octubre se emitió el programa en Radio Riachuelo FM 100.9.
De la sinergia entre ambos proyectos: “Aulas a cielo abierto “y “El fileteado porteño, el arte público en la escuela y sus repertorios visuales” nació “Filetes sobre rieles” que abrió la oportunidad para poner en valor los aprendizajes realizados en la escuela. “Filetes sobre rieles” concretó los acuerdos N° 192, 194 y 235, de la Mesa de Trabajo y Consenso de los cuales surgieron, a partir de varios plenarios laboriosos, los nombres para la locomotora y para los vagones. Los nombres para la locomotora acordados fueron: Ley 1153 y Mesa de trabajo y Consenso. La ley mencionada es la que estructura la forma de organización del Parque, instalando la participación entre vecinos/as trabajadores y gestión estatal.
Se presentó la propuesta general en el plenario del mes de septiembre de la Mesa de Trabajo y Consenso, y en el plenario de octubre se llevaron los bocetos /diseños elaborados por los/as chicos /as en la escuela. Es decir, hubo un trabajo mancomunado entre la escuela y el Parque.
Unas semanas después, los/as chicos/as de 5° de la escuela Homero Manzi, acompañados por su docente de grado Anabella Ferrara y la profesora de plástica recorrieron el Parque Avellaneda a través de un paseo pedagógico denominado “Viajes y viajeros”. Un paseo que buscaba encontrar respuestas colectivas a algunas preguntas como: ¿Ayer una Chacra, hoy un Parque?, ¿La Casona es un museo?, ¿A qué lugares reales e imaginarios pueden llevarnos el trencito y las obras de arte? ¿Hay un Cabildo abierto en el Parque?
Promoviendo el mundo de los viajes urbanos imaginarios, fantásticos y la poética del viajero transcurrió el recorrido. La Casona es un edificio asombroso donde la historia se enlaza con el arte, las huellas materiales del pasado abrazan a los mundos imaginarios del arte.
Durante el resto del viaje se fue desarrollando el proyecto; hubo, como en todo viaje, idas y vueltas, colores y pinceles, papeles transparentes y carbónicos, punzones y témperas, hojas de acanto y acrílicos a la tiza. y al agua.
Preparándonos para el gran día
Todo fue un proceso realizado en diferentes etapas. En primer lugar se preparó
la composición para diseñar los bocetos, luego se presentaron en la Mesa de
Trabajo y Consenso. Posteriormente en la escuela, se prepararon los chapones
y las valijas. Se limpiaron, lijaron y fondearon, se dejaron listas para pasar los
bocetos.
En otras clases se realizó el tradicional espúlvero (pasar el dibujo a la superficie
-chapa y madera) para después pintar las formas en plano lleno, para completar
luego con las luces y las sombras.
Hubo que practicar durante varias clases con la nueva herramienta, el pincel de
pelo largo carga. ¿Cómo cargar de pintura el pincel? ¿Cómo mantener el pulso
firme? ¿Cómo deslizar el pincel? ¿Cómo mezclar colores sobre los fondos
buscando complementos y simetrías? ¿Cómo elegir entre todos los colores
más adecuados?
En la estación Onelli: entre campanas y ornatos
Y en el mes de noviembre, bajo la sombra de los lapachos en flor se realizó la jornada especial en la estación Onelli en el Parque Avellaneda. La jornada tuvo cuatro momentos:
*Una ronda de bienvenida y juegos de presentación diseñados por practicantes del Instituto de Tiempo Libre y Recreación, Maga y Luciana.
**Luego los chicos fueron pasando por un circuito de seis mesas: en dos se los invitaba a pintar los chapones, en dos a pintar las valijas y en los restantes a realizar tarjetas con diseños fileteados.
**Ronda de muestra de producciones colectivas.
En las dos horas al aire libre que duró la jornada se notó: paciencia y espera, compromiso, poner en práctica lo aprendido en la escuela, el respeto y compañerismo. Un verdadero trabajo colectivo.
Todo tiene un final pero no todo termina
Finalmente, compartimos con las familias lo que puede hacer la escuela pública en el Parque público. Algunos días antes de culminar las clases, invitamos a las familias a interiorizarse de las acciones educativas realizadas para poner en valor lo trabajado y para que todes lo sigamos acompañando. En este viaje que seguimos proponiendo debemos aclarar que se cumplieron las dos primeras etapas: el trabajo en la escuela de preparación y práctica, y la implementación en el parque. Queda para el año que viene 2020, la tercer etapa, terminar con luces y sombras los chapones, colocarlos en la locomotora y... dar la tan esperada vuelta en el Trencito!
Esperamos que hayan disfrutado el viaje tanto como nosotras, al soñarlo y concretarlo con, por y para los chicos/as. Queremos señalar la importancia del trabajo conjunto entre instituciones públicas, es decir de todos/as, para concretar la valoración de un arte popular como el filete porteño y un bien histórico y cultural identitario como el Parque Avellaneda, una experiencia cultural y educativa que transforma al barrio y sus vecinos/as, nos posiciona como sujetos colectivos de aprendizaje y nos compromete con nuestro patrimonio cultural.
Escuela y Parque continuamos viajando, recorriendo trayectos compartidos, tomando pinceles diversos y soñando otros mundos posibles, construyendo memoria colectiva. Escuela y Parque continuamos viajando, fileteando la ampliación de nuevos horizontes para que las infancias sean protagonistas de la vida ciudadana y de la construcción de las identidades barriales, reivindicando sus raíces y sus alas.
Notas
[1] Maestra de educación plástica.
[2] Coordinadora de “Aulas a cielo abierto”.
[3] A cargo de la docente María Victoria Amarilla.